Parador Nacional de Benicarló
Un tesoro de la Costa del Azahar
Ubicado en la hermosa costa de la provincia de Castellón, en la comunidad Valenciana, es un encanto turístico que combina la serenidad del Mediterráneo con la rica historia y la hospitalidad española.
El emplazamiento
Una localidad famosa por su puerto y su producción agrícola, especialmente la alcachofa. Está ubicado en un espacio privilegiado frente al mar, permitiendo a sus visitantes disfrutar de vistas panorámicas al azul Mediterráneo. El encanto de Benicarló reside en su equilibrio entre una ciudad moderna y un pintoresco pueblo mediterráneo.
Arquitectura y diseño
Destaca por su arquitectura moderna que se fusiona a la perfección con el paisaje circundante. En su interior, se encuentra una combinación armoniosa de tradición y modernidad, con habitaciones amplias y luminosas que ofrecen vistas espectaculares al mar y a los jardines.
Instalaciones
Además de las hermosas habitaciones, el parador ofrece una serie de instalaciones que mejoran la experiencia de los visitantes. Posee una piscina exterior donde los huéspedes pueden relajarse y disfrutar del clima soleado, así como de una pista de tenis para los amantes del deporte. Además, cuenta con espaciosas zonas de estar y una biblioteca donde los visitantes pueden disfrutar de un momento tranquilo.
Gastronomía
Uno de los puntos fuertes es su restaurante. Aquí, los visitantes pueden disfrutar de la exquisita gastronomía local, que incluye una variedad de platos con pescado fresco del Mediterráneo y, por supuesto, la famosa alcachofa de Benicarló. El restaurante, con vistas al jardín y al mar, ofrece una experiencia gastronómica inolvidable.
Turismo en Benicarló
Benicarló, un precioso pueblo de la costa mediterránea española.
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Casco antiguo
La mejor manera de conocer Benicarló es pasear por su casco antiguo, un laberinto de calles estrechas y empedradas que esconden un sinfín de tesoros. Aquí encontrarás la Plaza de la Constitución, el corazón de la ciudad, donde se encuentra el Ayuntamiento, un edificio neoclásico del siglo XVIII. También merece la pena visitar la Iglesia de San Bartolomé, una imponente construcción gótica del siglo XIII, y la Prisión, un antiguo edificio del siglo XIV que hoy alberga un museo dedicado a la historia de Benicarló.
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El Castillo de Benicarló
Es una fortaleza del siglo XIV que domina la ciudad desde lo alto de una colina. Desde aquí podrás disfrutar de unas vistas espectaculares del mar Mediterráneo. El castillo está abierto al público y se puede visitar pagando una entrada.
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La Iglesia de San Bartolomé
La Iglesia de San Bartolomé es un templo gótico del siglo XIII que fue declarado Bien de Interés Cultural en 1991. La iglesia tiene una planta basilical con tres naves y un ábside poligonal. El interior está decorado con un rico patrimonio artístico, entre el que destacan el retablo mayor, de estilo barroco, y el altar de la Virgen de la Merced, patrona de Benicarló.
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Jardines del Papa Luna
Un hermoso jardín botánico situado en el interior de la ciudad. Los jardines están dedicados a la figura de Benedicto XIII, el papa que residió en Benicarló durante el siglo XV. En los jardines encontrarás una gran variedad de plantas y flores, así como una serie de esculturas que representan la vida del papa.
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El Puerto de Benicarló
Es un pequeño puerto pesquero que se ha convertido en un destino turístico popular. El puerto está rodeado de restaurantes, bares y tiendas, y ofrece una gran variedad de actividades, como paseos en barco, pesca deportiva y buceo.
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Playas
Benicarló cuenta con un litoral de más de 10 kilómetros de playas de arena fina y aguas cristalinas. Las playas más populares son la Playa del Morrongo, la Playa del Arenal y la Playa de Peñíscola.
